Seoraksan, otoño en Corea del Sur
Los colores del otoño no tienen igual. No importa en qué región del mundo estés, el otoño es maravilloso, yo creo que es más bonito incluso que la primavera. Los colores son de otro mundo, los rojos, dorados, ocres, los últimos verdes. Y un escenario particularmente hermoso para apreciarlo son las montañas. Los asiáticos, los japoneses y los coreanos en particular, son amantes de la contemplación del paso de las estaciones así que en este mismo momento gozan del otoño y sus postales.
Mientras en Japón hasta las noticias se llenan de pronósticos e imágenes sobre ciertos rincones especiales para contemplar el juego otoñal de colores lo mismo sucede cruzando el mar, en la península coreana. Aquí, los escenarios mas populares en esta temporada son las montañas y miles de personas acuden para no perderse el espectáculo. Ocres en las faldas montañosas y plata en las cumbres de la Montaña Myeongseongsan, Cheongwansan, Mindungsan, Oseosan o la montaña Seoraksan. Esta última es la primera que se le viene a la mente a muchos coreanos cuando piensan en el otoño.
Se trata de una montaña fabulosa surcada por muchos caminos de senderismo. Los mejores sitios para disfrutar de los rojos y dorados son el Valle Cheonbuldong con sus termas minerales y el manantial de cinco colores y los valles de Baekdam y Jujeongol. El primero es el valle principal de la montaña y caminar por sus múltiples rutas te lleva a descubrir desde estatuas budistas hasta bellas cascadas y cuevas. ¿Cómo llegas desde Seúl? No es dificil: tomas desde la Terminal de Autobuses Dong Seul un autobús express hacia Sokcho (2 horas y media por un precio de entre 16 y 18,400 won).
Desde Sokcho tomas otro autobús y desciendes en la última parada. Allí se inicia el camino. Es perfecto como excursión de un día ya que los autobuses desde Seúl salen desde las 6:25am.
Conéctanos