Pula, joya romana en Croacia
¿Sabíais que Croacia tiene un total de 1.185 islas, de las cuales apenas 66 están habitadas? Recorrer en barco las tranquilas aguas del Adriático es uno de los grandes placeres que podemos disfrutar en el país croata. En los últimos años son muchos los cruceros que se han decantado por este archipiélago de la costa. Un lugar en el que podemos descubrir verdaderas joyas con encanto.
Una de ellas es precisamente Pula, la ciudad más grande de la isla de Istria. Situada entre el Golfo de Trieste y la costa de Kvarner, su pasado romano la han convertido desde siempre en un destino fascinante. Su ubicación estratégica también ha provocado que haya pasado por manos ostrogodas, venecianas y austro-húngaras, hasta que tras la Segunda Guerra Mundial pasara a territorio croata.
Nosotros tomamos un pequeño barco que nos llevó desde Venecia hasta Pula. De ensueño tener la oportunidad de ver dos hermosas ciudades desde el mar, acompañados de los vinos de esta ciudad croata, muy famosos en la zona. Pula aún despierta un gran interés entre los aficionados a la civilización romana. Pasear por sus calles y plazas es recorrer lo que fue una de las grandes urbes del Adriático.
Hay lugares con ese sabor de lo antiguo, como la Plaza del Forum, donde se encuentra el Templo de Augusto, construido en el año 14, aunque su aspecto actual data de mediados del siglo XX, ya que fue totalmente destruido durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
Desde esta plaza hay que tomar la calle Sergijevaca, una de las principales vías comerciales de la ciudad. En ella encontraréis muchas tiendas, bares y restaurantes y, al fondo, la silueta del Arco de los Sergios, levantado por la familia del mismo nombre en el año 27 a.C. Formaba parte de las antiguas murallas de Pula, que fueron derribadas en el siglo XIX.
Para rematar nuestro recorrido romano por Pula hay que rendir honores al impresionante Anfiteatro, construido en el siglo I. Lo veréis muy bien conservado, y en la actualidad alberga el Festival de Verano y una serie de exposiciones en los pasos subterráneos. Una auténtica maravilla que no tienen mucho que envidiarle al Coliseo de Roma, la verdad.
A estos monumentos hay que añadirles la Iglesia Ortodoxa, la de San Francisco, el Museo Arqueológico, el edificio del Ayuntamiento que conserva la parte trasera del Templo de Diana, o el cuartel militar de Rujc.
Pula es una ciudad encantadora, ideal para pasar un fin de semana de relax al menos en la costa de Croacia. Sus grandes monumentos, su clima templado y la belleza pintoresca de sus paisajes os evocará momentos inolvidables a vuestro regreso.
Foto Vía Wikimedia
QUE MISTERIO , CÒMO ME GUSTARÌA PODER VISITAR ESOS HERMOSOS LUGARES, MÌ DESEO ES QUE ANTES DE MORIR IR A VER DÒNDE NACIÒ MÌ PAPÀ Y RECORRER ESOS LUGARES BELLOS, OJALÀ PUEDA CUMPLÌR CON MÌ DESEO SOY : LIDIA ELENA BALAÌC