Parque Nacional Tongariro, tierra encantada en Nueva Zelanda

El parque nacional mas antiguo de Nueva Zelanda está situado en la isla norte, se llama Parque Nacional Tongariro y ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO ya que combina escenarios naturales con una rica y antigua cultura. Este parque es de hecho el cuarto parque nacional natural declarado como tal en el mundo y fue establecido en 1887.

El hecho de que haya sido reconocido por la UNESCO pone el acento en la riqueza de la cultura maorí, el pueblo autóctono de aquí, y lo combina con la belleza de un paisaje volcánico sin igual. Cubre un área de 795.98km2 y está en el corazón de la isla a unos 330 km de la ciudad de Auckland y 320 de Wellington. Mucha de su superficie pertenece a la planicie volcánica y hay aquí tres volcanes, el Ruapehu, el Ngaruhoe y el Tongarino, algunos lagos y pequeños pueblos que están mas que nada en la frontera del parque ya que dentro solo están los pueblos turísticos de Whakappa y el Iwaku.

El pueblo maorí le da a esta tierra un gran significado y para protegerla de la invasión de colonos europeos uno de los grandes jefes maoríes le otorgó a la Corona inglesa las tierras a fines del siglo XIX para que la convirtieran en un área protegida, de ahí que antes del siglo XX se le declarara parque nacional.

Fue entonces a comienzos de siglo que se construyeron aquí los primeros servicios dedicados al turismo, pero recién cuando llegó el ferrocarril y las primeras carreteras en la década del ’30 que el número de visitantes creció significativamente. Las actividades posibles tienen que ver con hacer cabalgatas, rafting, cazar, pesca deportiva, caminar, hacer excursiones por sus tantos senderos especiales disfrutando de los paisajes y  escalar los montes. Se proponen excursiones de distinta duración y algunos viajes pueden durar una semana.

Además, en invierno está la posibilidad de esquiar y practicar snowboard en las pistas de esquí mas  grandes de toda Nueva Zelalanda en Whakappa y Turoa. Piensa que en Nueva Zelanda se filmó buena parte de El Señor de los Anillos así que hazte una idea de lo espectacular de los paisajes.