De Viena a Budapest, capitales imperiales
Viena y Budapest son dos de los principales destinos turísticos de Europa. Capitales imperiales ambas, son muchos los turistas que se aventuran a planificar cómo ir de Viena a Budapest, o viceversa, ya que las dos ciudades apenas están separadas por 245 kilómetros. Esta cercanía y el hecho de estar ante dos ciudades monumentales invitan a preparar una visita conjunta.
Conociendo Viena
Viena es la capital de Austria, un país que es un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza, la arquitectura y la música entre otros elementos. Situada a orillas del Danubio, resulta impactante comprobar la belleza barroca de sus edificios, testigos directos de muchos de los más grandes acontecimientos ocurridos en Europa. Solo hay que recordar que el centro histórico de Viena es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 2001.
Allí encontramos castillos y jardines barrocos, el maravilloso palacio imperial de Hofburg, la Staatsoper o edificio de la ópera nacional, la magistral Catedral de San Esteban, una de las iglesias góticas más fascinantes de Europa, que lucha en importancia con la Iglesia de San Miguel, y, cómo no, elementos tan curiosos pero simbólicos como las casas de Beethoven, Freud o Mozart. Porque Viena, entre otros aspectos, es una de las capitales europeas de la música clásica.
No podemos olvidar que Viena cuenta además con algo más de 50 museos, entre los que destacan el Kunsthistorisches Museum, el Museums Quartier, o las colecciones que podemos ver en el Castillo de Belvedere y el Palacio de Albertina. Fuera del centro histórico la visita imprescindible, además del famoso Prater, nos lleva hasta el Castillo de Schonbrunn, conocido como el Versalles austríaco, residencia veraniega de los Habsburgo.
Conociendo Budapest
Si Viena es una capital mágica, Budapest no se queda ni mucho menos atrás. Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987, la capital húngara también duerme a los pies del Danubio. Al igual que Viena, la belleza de su arquitectura es sencillamente deslumbrante. La Perla del Danubio, formada por tres núcleos de población (Buda, Obuda y Pest) es la elegancia hecha ciudad.
En ella disfrutamos de una serie de visitas imprescindibles, tales como el majestuosos Palacio Real, que hoy alberga la Galería Nacional y el Museo de Historia, la Iglesia de San Matías junto al Baluarte de los Pescadores, el Castillo de Budapest, atalaya de la ciudad desde la colina, la ciudadela del monte Gellert, otro de los miradores de Budapest, y el Puente de las Cadenas. La belleza de este puente al anochecer enamora de forma sublime.
Frente al Danubio la majestuosa planta del Parlamento húngaro, uno de los edificios neogóticos más hermosos de Europa. No perderos tampoco el Museo Nacional Húngaro, el barrio judío, la Plaza de los Héroes, el Museo de Bellas Artes y, aprovechad la oportunidad, ya que Budapest cuenta con hasta cincuenta baños termales. De entre ellos hay que recomendar los baños de Gellert en el barrio de Buda.
Pero, como os decíamos al principio, ¿y si queremos aglutinar en un solo viaje ambas ciudades? En realidad, hay muchas opciones de transporte para salvar los 245 kilómetros que separan a ambas capitales. Lo más factible es hacerlo en tren, en coche, en autobús o incluso en barco.
Formas de ir de Viena a Budapest
– Tren
Viena y Budapest (junto con Praga) están unidas por lo que se conoce como la Ruta de las Capitales Imperiales. Saliendo desde Viena, en menos de 3 horas llegamos con nuestro tren a Budapest. Realmente no es necesario ni tan siquiera reservar los billetes con antelación (aunque es lo aconsejable) ya que son hasta 9 los trenes que, a diario, unen ambas capitales. El precio de un billete en clase turista es de 39,80 euros.
- Más información: Viena a Budapest en tren
– Coche
Desde Viena a Budapest hay una distancia de solo 245 kilómetros, lo que quiere decir que en poco más de 2 horas estaremos en nuestro destino. Las carreteras están perfectamente señalizadas y, a diferencia del tren, podemos hacer un pequeño desvío a la salida de Viena y visitar Bratislava, la capital eslovaca, situada a 80 kilómetros de la ciudad vienesa. A mitad de camino hasta Budapest también podemos detenernos en la bonita ciudad húngara de Gyor.
– Autobús
El autobús es otra opción muy interesante para viajar de Viena a Budapest. Se tarda un poco más que el tren, 2 horas y 50 minutos, aunque el precio es menor (los billetes suelen costar unos 20 euros ida) El único inconveniente es que no hay demasiados autobuses diarios que unan ambas capitales (unos 5 en total) de ahí que, si queréis ir con tranquilidad, y no os importa el horario, es mejor el tren que el autobús. Por precio, más barato sin duda el bus.
– Barco
La opción más pintoresca es haciendo un crucero a través del Danubio. Hay diferentes compañías que realizan este tipo de viaje, algunas de ellas con pequeñas paradas en ciudades como Bratislava y Visegrad. Estos cruceros tardan unas 5 horas y media en cubrir todo el recorrido, y el precio de los billetes oscila entre los 90 y los 100 euros. Eso sí, estos cruceros operan desde finales de abril hasta octubre.
Como veis son muchas las opciones que tenemos de llegar desde Viena a Budapest. La cercanía de ambas ciudades y las facilidades de comunicación hacen que, si estáis pensando visitar alguna de ellas, intentéis hacer todo lo posible por agrupar el viaje en uno. Seguro que si el tiempo lo permite, lo agradeceréis.
– Excursión organizada
Si lo que se pretende es conocer Budapest durante la estancia en Viena, existe la posibilidad de contratar una visita organizada y así evitar quebraderos de cabeza. Y es mejor aún si se puede realizar con guía español.
Más información y reserva:
Excursión a Budapest desde Viena
Hola, Mónica:
En la página de volanbusz (http://www.volanbusz.hu/en) puedes reservarlos. A la izquierda de esa página, hay una opción para sacar billetes internacionales.
Saludos.
Hola! me gusto mucho tu reportaje, y quería saber con qué empresa o linea podía buscar el crucero que recomiendas para ir de Viena a Budapest directamente (5 hrs). he buscado alternativas pero no encuentro.
te agradecería yu ayuda
saludos
Angelica
Realmente estoy asqueada del trato de la empresa de buses Group, que ofrece viajes desde Budapest con destino a Praga; tiene mal olor, el conductor con mala cara al hacerle preguntas, no nos daba ni siquiera la confianza de estar yendo a nuestro destino, han puesto una cortina a mitad del pasillo dividiendo el bus en dos, ni idea de lo que quieren tapar, han puesto música a todo volumen a la 1 de la mañana cuando el bus se estacionó buen rato, le digo la chofer que no ponga música porque queremos dormir y se hace el idiota, he tenido que alzar la voz para que me haga caso, la calidad es como la de un bus informal, he viajado en mucho mejores buses en países en vías de desarrollo. Esto es una vergüenza total y un asco, encima es la empresa que ofrece el pasaje más caro.