Cuándo ir de visita a Islandia

Si hay un lugar que inmediatamente relacionamos con el hielo y el frío es Islandia. Esta isla se encuentra en el Atlántico Norte, su capital es la ciudad de Reykjavik y apenas viven allí alrededor de 320 mil personas. Estuvo bajo el dominio sueco-danés durante gran parte de su historia pero desde el final de la Segunda Guerra Mundial forma un estado independiente, una república. Islandia y el conjunto de islas que la acompañan están más cerca de Groenlandia que de Europa, aunque culturalmente siempre ha estado cerca del segundo.

Islandia es un país con bellos paisajes naturales, hay volcanes, icebergs, montañas y glaciares. Es como si todavía no terminara de formarse. Una belleza que nunca deja de asombrar. ¿Pero cuándo es la mejor época para visitarla?…

Los guías de turismo dicen que la mejor época es en los meses de verano, esto es desde mediados de junio hasta finales de agosto, pero eso no quita que también sea un destino atractivo el resto del año. Las ventajas del verano es que las temperaturas son mejores, hay mas horas de sol, incluso durante la noche, las rutas están abiertas y lo mismo los refugios en las zonas mas agrestes, los museos abren todos los días y las posibilidades de excursiones se multiplican.

Eso sí, el Sol de Medianoche puede ser todo un problema para conciliar el sueño y como es temporada alta hay que hacer siempre reservas. Es lo que podemos decir de los contra de ir a Islandia en verano, pero no mucho más.

¿Y la primavera?… La primavera aquí comienza un poco mas tarde que en el centro de Europa, a principios de abril y dura hasta mediados de junio. Los días ya son largos, hay más luz, los precios no son tan altos, están todas las plantas en flor y las atracciones turísticas no están muy llenas de gente. Los contra tienen que ver con que las rutas todavía no están abiertas y la oferta turística está reducida.

¿Y el invierno en Islandia?… Muy frío. Va de noviembre a marzo y es temporada baja así que todo está más barato y cubierto de nieve. Las Luces Polares brillan en el cielo y los días son cortos así que no se puede hacer mucho.  El otoño, por último, nos deja un país casi sin turistas, comenzando septiembre. Los precios bajan, las noches empiezan a ser mas largas, en septiembre ya aparecen las luces en el cielo y los vuelos son más baratos pero también hay menos cantidad. Para tener en cuenta.

Foto: vía Photo Travel